jueves, septiembre 08, 2011

A cielo abierto, contra tempestades.


Y es que, nada puede hacernos decaer cuando estamos ahí arriba.

No hoy, no ahora, no cuando se sabe que siempre hay quien te agarre. Quizás haya vaivenes, por culpa del aire, pero mientras nos queden fuerzas, mientras quede calor, soltemos amarras, abandonemos lastres.

Que no hay nada más, ni abajo ni detrás. 

Simplemente, ECHEMOS A VOLAR.

1 comentario:

Clara Cortés dijo...

*_*
Precioso :)
Me encanta (: