miércoles, noviembre 09, 2011

Directo al corazón

A veces, me dejo llevar por la ilusión de que es sólo un capricho.
Que lo imposible es lo que siempre más anhelamos.
Pero luego, al sentir las mariposas... no, más bien los elefantes, que pisotean mi estómago con simplemente verle, borran de un plumazo toda lógica.
Es entonces cuando me entra el miedo por la garganta, me hace apretar los dientes, respirar más fuerte, combatir las ganas de gritar que estoy ahí. Baja por la garganta, congela mi cuerpo hasta la punta de los pies, atenaza mis músculos y bloquea mi mente. Me obliga a apartar la vista, a encogerme, a hacerme invisible.

Es un corazón dañado, harto de sufrir por algo que está tan lejano. Es un corazón que no ha aprendido de los errores, que sueña y se ilusiona, sabiendo que está prohibido. Es lo que queda de caída tras caída, de algo enamorado de una mentira que él mismo ha construido día a día. Es un corazón a tiras, que aún se para con una mirada, que echa a latir desbocado con una sonrisa. Es como un inocente que se ha condenado libremente a muerte.

4 comentarios:

Clara Cortés dijo...

*-*
Cada vez que leo "Él" de tus letras, mi cerebro completa el nombre...
Teq :)

Clara Cortés dijo...

PD: No estés triste :( porfi

desertdew dijo...

Thanks for sharing such valuable information.Keep posting such great info for us thanks

Arya Sennel dijo...

You're wellcome desertdew :) Thank you for reading my crazy ideas!!